Una visión de conocidos pasajes de la Biblia a través de los ojos de un Caín crítico ante un Dios arbitrario e irresponsable. Saramago, con su característica ironía, cuestiona a través de un Caín, que nada tiene que perder, la obediencia incondicional y el autoritarismo de un Dios muchas veces inconsecuente y contradictorio cuando no cruel.
Obra breve pero intensa en contenido del genial premio Nobel, que no ha de gustar a religiosos recalcitrantes pero que absorberá a cualquier persona que la lea con espíritu abierto.
David Villanueva
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